En los
últimos tiempos he leído una gran cantidad de artículos de mayor o menor
longitud o profundidad, en los que se habla de Imagen política o la Imagen de
un político.
Que sus
gestos, que su forma de hablar o de “bramar”[1],
que su forma de vestir o de posar para una fotografía, en fin se analizan y se
opina de muchos aspectos de los políticos de estos tiempos.
Ciertamente,
el nuevo mundo de quien se dedica o desea intervenir en política, está constituido
por un enjambre de asesores y entonces, aquí me pregunto ¿para qué tantos
asesores? Y el lector, a su vez, se preguntará por qué me pregunto esto.
La respuesta
es sencilla: la Imagen de un político no se refiere únicamente a su persona,
sino que es incidente en todo aquello que le rodea, como por ejemplo los actos
en los que participa.
El caso, en
esta oportunidad, se refiere a la Convención de la Unión Cívica Radical,
llevada a cabo el 14 de marzo, en el teatro Español de Gualeguaychú, provincia
de Entre Ríos, tal como lo muestran las imágenes a continuación.
Y por qué
afirmo “…en todos los actos que participa”
porque de la Convención mencionada, surgiría el futuro candidato presidencial.
Vale decir: aquel político que se presentará en la elecciones del mes de
octubre de 2015 como candidato a ser el Presidente de la Nación Argentina.
Como futuro
Presidente, un político y su entorno de asesores, no pueden ni deben dejar
librados al azar lo que para algunos pueden ser “detalles menores”.
Señoras y
señores: la Bandera Nacional no es un detalle menor, es nuestro máximo símbolo
de identidad nacional y como tal debe ser colocada en el lugar de mayor honor y
ser tratada con respeto.
En la
imagen precedente, además de una puesta en escena que, más allá de querer ser
discreta o de “bajo perfil”, demuestra descuido y desinterés, se pueden ver dos
banderas a la derecha protocolar (que corresponde a la izquierda del
espectador), la Bandera Nacional y la bandera de la Unión Cívica Radical, y que
en la pantalla se observan con mayor detalle: están mal ubicadas.
- La Bandera Nacional, jamás cede la derecha.
- La Bandera Nacional, siempre se coloca junto a otras que representan a diferentes países.
- Jamás se mezcla con enseñas o distintivos políticos, corporativos, etc.
- El símbolo de la UCR, debería haberse colocado a la izquierda de la Nacional o bien, en el otro extremo del escenario, obviamente, a la izquierda.
Como afirma
el Dr. Miguel Ángel Mirabella: “Los
símbolos siempre significan porque están en lugar de algo para ser su
equivalente y por eso se distinguen de lo simbolizado, tengan o no relaciones
intelectuales o afectivas con él. Porque sólo se distinguen, los símbolos no se
separan de lo simbolizado, ni en lo intelectual ni en lo afectivo. Por esta
razón, el lenguaje simbólico es críptico y cerrado, dice más de lo que expone y
expone menos de lo que dice. Si es sensible se lo mira para ver la profundidad
que oculta y si es intelectual se lo describe para evitar encerrarlo en la
definición.”
Si
cuando una persona se siente enferma, concurre al médico o bien cuando se
enfrenta a un litigio, acude a un abogado, cuando se desconocen temas de
Protocolo y Ceremonial o Etiqueta, se debe solicitar asesoramiento a los
profesionales especialistas en estos temas, pero no a cualquiera, sino a
aquellos con ética y probada trayectoria.
[1] Bramar: “Dicho de una persona: Manifestar con voces articuladas o inarticuladas
y con extraordinaria violencia la ira de que está poseída.” DRAE.
Por Edith Pardo San Martín